Analizamos Total War: Pharaoh
Total War: Pharaoh es un videojuego desarrollado por The Creative Assembly, distribuido por SEGA para las plataformas Mac OS, macOS y PC (plataforma desde la que realizamos el analisis correspondiente).
Total War: Pharaoh es un titulo que puede ser jugado tanto en solitario disfrutando de su increíble campaña como contra otros jugadores en línea. Juego que se encuentra subtitulado al castellano y que pertenece al genero de la estrategia, es mas, es quizás el referente por antonomasia de la estrategia en tiempo real o al menos lo que ha demostrado entrega tras entrega en su serie Total War.
Nos encontramos ante un nuevo y flamante juego de esta icónica saga. Un juego que nos lleva a una nueva época situada en el antiguo Egipto, mas concretamente una época de tribulaciones donde numerosas fuerzas se alzan contra el poder tras estar cerca el fin del gran faraón Merneptah.
Para ello el jugador tendrá que elegir entre ocho lideres de distintas facciones (cada uno con sus propias características, habilidades y carisma) que las emplea para dirigir a su facción como líder principal y ser la espada capaz de conquistar el desierto aniquilando a los enemigos que osen interponerse entre ellos y el poder.
Dependiendo de nuestra elección comenzaremos en una parte distinta del mapa, un mapa interactivo que cambia conforme se avanza por el mismo observando como las distintas facciones luchan por el poder enfrentándose no solo contra nosotros, si no también, entre ellas mismas. Para ello podremos tomar distintos tipos de iniciativas como puede ser tomar una provincia, anexionarla, saquearla, es decir, todo un abanico repleto de acciones que permite luchar por levantar nuestra nación aplastando al enemigo o bien anexionándolo y permitiendo vivir junto a nosotros.
Por otra parte cada facción dispone de sus propias unidades y capacidades, logrando que se diferencien por completo de las del enemigo en pantalla. Es decir, podemos tener una infantería capaz de cargar con bastante fuerza, pero que fácilmente pueden perder la moral y salir corriendo, o bien una unidad de arqueros capaz de disparar a mayor distancia que la del enemigo. Con esto queremos decir, que cada facción es un mundo y es nuestra obligación conocer todas y cada una de las unidades a nuestra disposición para usarlas sabiamente en la batalla.
Para reclutar a dichas unidades, nuestros generales pueden hacer uso de su propio sistema o bien usar los asentamientos junto con las distintas edificaciones (te saldrá mucho mas barato), pudiendo especializar cada uno de ellos intentando que conserven cierto balance entre lo que es capaz de producir turno tras turno y ofrecer para poder seguir reclutando (cada unidad tiene un coste distinto, así como una representación completamente distinta en la pantalla).
Si nos apartamos del modo campaña, tenemos la libertad de disfrutar de todo tipo de combates bien contra la propia inteligencia artificial o contra otros jugadores, de modo que la jugabilidad es realmente ilimitada (dichos enfrentamientos permiten todo tipo de personalización). Y es que es precisamente el punto al que queríamos llegar, pues no podíamos irnos sin hablar del combate. El combate permite elaborar todo tipo de estrategias comenzando por la situación de las unidades en pantalla, su orden, formación, es decir, tendremos un control total sobre las mismas y sus acciones cambian dependiendo de las mismas. Tendremos unidades cuerpo a cuerpo, de caballería, a distancia, es decir, un gran elenco que tendremos que gestionar en tiempo real cubriendo cada flanco, haciendo frente al acoso por parte de la artillería enemiga o incluso a una carga de una unidad de elite.
La recreación y el empeño de cada una de las unidades en pantalla es fantástica, una dedicación para que podamos recrear todas y cada una de las batallas con una intensidad francamente cercana a lo que podríamos vivir si fueran reales y logra como no, mantener al jugador atrapado en la misma sin dejarme un momento de respiro (ojo como una batalla que pensabas ganarías es capaz de cambiar drásticamente por el fallo de una unidad o bien cualquier eventualidad en forma de tormenta de arena, fuego, etc.).
En lo que respecta al apartado artístico, encontramos un juego que deslumbra visualmente al jugador mostrando cada mínimo detalle de las unidades que figuran en el campo de batalla. Unas unidades que respetan las acciones del jugador, demostrando la capacidad que tiene el mismo a la hora de organizarlas y darles instrucciones y como estas se reflejan fielmente en la pantalla. La calidad de los escenarios, asentamientos e historia es francamente buena, mostrando animaciones de gran calidad, un sonido realmente bueno y una puesta a punto que nos lleva a dicha época.
En resumen, Total War: Pharaoh es un titulo imprescindible para todo amante de la saga que busque ser fascinado por impresionantes batallas repletas de unidades, formaciones y todo un ejemplo de lo que esta saga es capaz de hacer entrega tras entrega.
Aquí os dejamos el tráiler de lanzamiento: