Analizamos Ravensword: Shadowlands

Ravensword: Shadowlands es un titulo desarrollado originalmente en su versión para la plataforma PC por Crescent Moon Games y portado posteriormente en su versión para consolas por Ratalaika Games, pudiendo encontrarlo par alas plataformas Playstation 4, Mac OS, Linux, Nintendo Switch y Xbox One. En este caso la versión a la que hemos tenido acceso gracias a un código ofrecido por Ratalaika Games es la de Xbox.


Ravensword: Shadowlands es un juego tipo RPG con grandes dosis de acción para un jugador que te transporta al reino de Tyreas, un reino que se encuentra asediado por todo tipo de seres y que solo tu como descendiente de una antigua linea de reyes podrás liberar. 


Para comenzar con el análisis indicar que el mundo que vais a recorrer es tan amplio que vais a disfrutar recorriéndolo bien a pie, a lomos de un caballo o incluso con una montura voladora. Un mundo lleno de personajes por descubrir que no dudarán en pedirnos ayuda en forma de misiones (normales o incluso de reputación). 

Dichas misiones albergan todo tipo de acciones, desde adentrarnos en una peligrosa cueva y recuperar un objeto a enfrentarnos a todo tipo de criaturas, pues el combate en Ravensword: Shadowlands es sumamente importante.


A la hora de combatir, vamos a poder hacerlo bien a lomos de nuestra montura o bien a pie, que será lo normal. Pues bien, dicho combate requiere de cierta pericia debiendo saber cuando es mejor atacar, defender o bien esquivar, debiendo tener buenos reflejos. 

Nuestro personaje puede llevar todo tipo de objetos, desde espada, maza, hacha, arco, ballesta, escudo. En definitiva prácticamente cualquier arma que encontremos (cada una con sus propias características), así como habilidades que iremos mejorando conforme recorremos el reino.


Nuestro personaje evoluciona al mismo tiempo que recorremos el juego, pues conforme mas experiencia conseguimos mas podemos subir de nivel enfocando a nuestro héroe con las estadísticas que creamos mas oportunas, permitiendo que cada uno sea único y personalizando el mismo como mejor creamos conveniente.


En lo que respecta a su apartado artístico, Ravensword: Shadowlands es un juego que cumple en su desarrollo, pues debemos de pensar en que el global del mismo es realmente brutal gracias a la cantidad de acciones y cosas por realizar. Por si fuera poco, la banda sonora ha sido compuesta por el compositor Sean Beeson.


En resumen, un juego con multitud de tareas por recorrer, una historia rica en contenido y un desarrollo realmente fantástico.